Christian Bryant Los estudiantes universitarios tienen muchas cosas en la cabeza. Entre las clases, exámenes, proyectos y los estudios nocturnos, las preocupaciones por la salud pueden quedar en segundo plano. Los estudiantes duermen poco, comen alimentos poco saludables para el cerebro y no siempre tienen tiempo para hacer actividad física diaria. Pero las investigaciones sugieren que una de las mayores amenazas para el bienestar de los estudiantes puede ser su salud ocular.
Una de las principales razones del aumento de enfermedades oculares en estudiantes es el uso de la tecnología. La Asociación Americana de Optometría ha informado de que una persona promedio pasa entre 8 y 12 horas al día frente a un dispositivo móvil y/o computadora. En el caso de los estudiantes universitarios, esta cifra es aún mayor, y pueden llegar a pasar hasta 10 horas al día mirando pantallas.
La exposición prolongada y recurrente a la luz LED azul que se encuentra en las pantallas de las computadoras, teléfonos y otros artículos tecnológicos puede causar el Síndrome Visual Informático (CVS), que incluyen tensión ocular, ojos rojos y llorosos, dolor de cabeza y dolor de cuello y hombros. Las consecuencias a largo plazo del CVS pueden dar lugar a daños en la salud ocular y a una alteración de la visión en el futuro. Por eso es tan importante que los estudiantes universitarios protejan sus ojos de estas influencias estresantes, para evitar futuras ramificaciones.
Aquí hay cinco maneras para que los estudiantes universitarios protejan su salud ocular:
Configura adecuadamente tus dispositivos
No es práctico tratar de evitar la tecnología y la luz azul por completo. Esto es especialmente cierto para los estudiantes universitarios, ya que casi todos los apuntes, tareas y el estudio se realizan en computadora o una tableta. Por ello, una de las formas que tienen los estudiantes de proteger sus ojos es asegurarse de que su tecnología y sus dispositivos están configurados correctamente. La configuración correcta de los dispositivos puede ayudar a reducir los síntomas del CVS e incluso a eliminar algunos efectos de la luz azul.
Lo que debes tener en cuenta al configurar el uso del ordenador:
- Siéntate a un brazo de distancia de la pantalla.
- Inclina el monitor ligeramente hacia arriba.
- Equilibra el brillo de la pantalla con tu entorno.
- Aumenta el tamaño de la letra.
- Reduce el resplandor de la pantalla.
- Ajusta el color para que sea más amarillo, en lugar de azul.
- Siéntate en una mesa o escritorio y utiliza una silla con soporte para la espalda.
- Mantén los pies en el suelo para apoyar el cuello y los hombros.
Intenta trabajar durante el día en habitaciones con mucha luz natural, pero sin demasiado resplandor. También, aunque no siempre es posible, intenta evitar trabajar a altas horas de la noche o en salas mal iluminadas, ya que estas cosas pueden contribuir a la fatiga visual.
Toma descansos.
Cuando se utiliza dispositivos electrónicos por largos periodos, tomar descansos es extremadamente importante no solo para tu cerebro, sino también para tu salud ocular. La próxima vez que estés estudiando o haciendo tareas, prueba la regla del 20-20-20. Esto significa que por cada 20 minutos que pases mirando una pantalla, debes mirar algo que esté al menos a 6 metros de distancia durante 20 segundos. Incluso esa rápida pausa de 20 segundos puede hacer maravillas para que tus ojos se sientan refrescados y menos tensos por la exposición prolongada a la tecnología.
Otra buena regla es que, por cada hora que pases con la tecnología, te levantes y te tomes un descanso de 10 minutos de la pantalla. Estos breves descansos no solo ayudan a los estudiantes a proteger sus ojos de mirar fijamente una pantalla durante demasiado tiempo, sino que también ayudan a aumentar la productividad y mejorar la salud ocular.
Sal al exterior
Apagar la tecnología y pasar tiempo al aire libre tiene muchos beneficios sorprendentes, como el aumento de la inmunidad, la disminución de los niveles de depresión, mayores índices de felicidad e incluso la prolongación de la esperanza de vida. Pero también es bueno para la salud ocular y disminuye las posibilidades de desarrollar miopía.
Sin embargo, como estudiante puede ser difícil encontrar tiempo para pasar al aire libre. Si una caminata o un paseo en bicicleta parecen inalcanzables, ¡intenta llevar tu trabajo al aire libre! Encuentra un árbol favorito en la universidad para estudiar o una mesa en un parque cercano para terminar tus lecturas o tareas. Pequeños ajustes como estos son grandes maneras de que los estudiantes universitarios protejan sus ojos de la sobreexposición a la tecnología y les permitan empaparse de los beneficios del aire fresco y la luz solar natural.
Usa lentes de protección contra la luz azul.
Otra forma de reducir las ramificaciones de la exposición prolongada a la tecnología es comprar gafas con lentes diseñadas para filtrar la luz azul de los LED. Un estudio reciente descubrió que “el fotodaño de la retina causado por (la luz azul de los LED) puede volverse crónico si la exposición es alta y lo suficientemente prolongada”. En cambio, el uso de filtros que bloquean el azul puede aliviar significativamente la pérdida funcional de las células fotosensibles de la retina”.
Hoy en día, muchos profesionales de la licenciatura en optometria ofrecen la opción de incluir un filtro de luz azul LED en los lentes.
Tomar estas medidas para asegurarte de que estás protegiendo su visión es esencial, especialmente si eres un estudiante. Cuando das prioridad a tu salud ocular durante una época tan agotadora como la universidad, te defiendes de las numerosas deficiencias visuales que pueden acompañar a la exposición prolongada a la tecnología, los materiales de estudio y los entornos estresantes. Si empiezas a proteger tu vista ahora, sin duda te lo agradecerás en el futuro.
Seguro te interesa leer: ¿Equilibrar los estudios, el trabajo y la vida personal? ¡Sí se puede!
